
Si tan solo pudiera cambiar mi vida…
A veces parece poco creíble que he «hecho de todo» para que en mi vida se de un verdadero cambio. He probado el tarot, los talleres de catarsis, el ejercicio extremo, el yoga, la meditación, las clases de metafísica, los calmantes, el alcohol y las dietas de comida orgánica, vegetariana, de la zona, sin gluten, de carbohidratos y hasta las malteadas de proteínas. Pero, nada cambia sigo siendo simplemente Paty…
Tal vez en el fondo no creo en el verdadero cambio, aunque, también es cierto que si fuera posible no se si estaría dispuesta a transformarme. No pienso que sea fácil renunciar a los beneficios ocultos de ser como soy porque implicaría perderlos y, eso sí me da miedo. Tendría que hacerle frente al monstruo que más temo: a MÍ.
Suponiendo que con solo apretar un botón mi vida sería distinta, no estoy cierta de que me animaría a apretarlo, si bien se que mis sufrimientos son verdaderos, también es cierto que la idea del cambio me produce sentimientos opuestos y es por ello que prefiero mantener el statu quo. Es decir que, elijo que las cosas se queden como están porque si decidiera dejarme de sentir desgraciada con mi existencia perdería todas estas ventajas que tengo en la vida:
– Cuando me altero, mi esposo me presta mucha atención.
– Puedo justificar todo el alcohol que bebo y los ansiolíticos que me tomo.
– Puedo quejarme de que mis amigas, mi pareja y mis hijos no son como yo quiero que sean.
– Puedo estar enojada gran parte del tiempo y quejarme todo lo que se me de la gana.
– No tengo que salir a buscar trabajo, cosa que me da terror.
– Puedo sentirme especial porque sufro mucho y eso me da derechos que los otros no tienen…
En fin hay muchas cosas que gano si me quedo atascada en el lugar en el que estoy hoy porque si estuviera mejor tendría que trabajar mucho para conocerme, dejar de beber, buscar un trabajo y ser como todo el mundo: «común y corriente». Además tendría que relacionarme de otra manera, sin ser la víctima enojada, y por añadidura, tendría que dejar de quejarme… lo cual ya hasta me gusta y soy toda una especialista en ello.
Muchas personas son como yo por eso creo que no hay nada de malo en ello pero por algo estoy buscando el cambio por todos lados !hasta en mi carta astral! y nada de nada. Tengo un pie en el agua y otro en la orilla. Sí, por una parte busco desesperadamente transformar mi vida, pero, al mismo tiempo, yo me resisto al cambio. Estoy atrapada y empantanada.
¿Tú qué opinas del caso de Paty?
Yo creo que necesita enfrentarse cara a cara con las cosas que más teme y realizar ciertas acciones que implican un duro trabajo con sus emociones, sus problemas y sus pensamientos de tal manera que pueda poner en marcha acciones dirigidas al cambio, a pesar de que, va a perder sus ganancias secundarias que solo son las que equilibran su insatisfacción, no son una fuente de bienestar verdadero. La responsabilidad personal sí lo es.
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